sábado, septiembre 03, 2005

Mi nueva religión

De acuerdo, la noticia ya tiene días, pero lo merece. A partir de hoy soy un adepto a una nueva religión: la Iglesia del Monstruo-Espagueti Volador

Esta religión verdaderamente me ha abierto los ojos. No fue Dios quien creó el Universo, sino el Monstruo-Espagueti Volador, de hecho aquí tenemos una imagen que lo muestra muy claramente. Nos enseña, qué digo enseña, nos demuestra que Él creó los montes y los árboles:


Esta dibujo, le fue dado por obra y gracia de Él a Bobby Henderson, su profeta, y ya se han dado casos de nuevos milagros, como el convertir una taza de zumo en una taza de salsa marinara, así como convertir el vino y la cerveza en vino italiano.

Él es invisible e indetectable, por ningún medio, ni existente ni futuro.Estaba allí cuando se creó la Tierra, y fue Él y no Dios quien creó al Hombre mediante un diseño inteligente
No me oculto, yo practicaré esta religión en todo cuanto pueda, llevaré el orgullo y el amor de los Pastafaris allá donde no haya un tenedor, allá donde falten manteles a cuadros rojos y blancos.

La verdad es que ser Pastafari tiene sus obligaciones, como terminar cada oración con RAmén, en vez de amén, y también intentar vestir como piratas en todo lo posible. Aquí fallo, pero sé que Él, en su Infinita Salsa y Grandiosidad, me perdona. Y también tiene sus ventajas, cuidao! Para empezar, cada Viernes es fiesta religiosa, así que me voy preparando para una semana de 4 días laborables y 3 festivos (más puentes, ojo!) Además, al igual que los fideos que los forman, nuestros niveles de moralidad son ridículamente bajos. Y por si fuera poco, nos prometen en el cielo una fábrica de strippers y un volcán de cerveza...

Si hay quien ve a la Virgen en una loncha de queso, o quien ve a Jesucristo en una tortilla, la pregunta es ¿dónde se manifestará nuestro Amado Monstruo-Espagueti Volador para no resultar redundante? Y más aún, ¿sabías que es imposible partir un espagueti en dos? Siempre se parte en 3 o más trozos

Un nuevo camino se abre ante nosotros, y Él nos guía hacia la Felicidad.

Ramén.





La noticia bien contada y su por qué, aquí

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