El próximo lunes 28 no hablaré. No realizaré ninguna comunicación hacia afuera de forma voluntaria. Puede que me ría, o si alguien me asusta, que de un brinco. Os leeré, pero no postearé ni comentaré. En cuanto a los amigos, si coincide, estaré con ellos, y les escucharé pero no hablaré.
No voy a sustituirlo por gestos, o un cuaderno y un lápiz. Es un día para mí, para reflexionar.
Esto tiene su raíz en el Banco de Promesas, en una promesa a la cual me apunté.
De momento mi madre piensa que estoy loco, y lo ve con incredulidad. Bueno, cuando llegue el momento ya os iré contando.
viernes, noviembre 25, 2005
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1 comentario:
en este caso la promesa la ha hecho un tipo y ha creado un blog específico para él. Yo le enviaré mis reflexiones para que las ponga, y también las pondré en mi blog.
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