A veces algunos equívocos pueden dar lugar a errores. Por esto, es mejordesfacerlos cuanto antes.
Anoche estaba yo en un bar con RosaPalo, mi novia (hazte un blog, venga!) y fue a la barra a pedir una caña. Entonces, me quedé yo mirando en esa dirección, emparanoiándome en mi mundo hiperespacial. Me imaginaba a mí, en el programa 'Las Cerezas' o en alguno de entrevistas (Julia Otero, Ana García Siñeriz... hummm...)en directo en el que me preguntaba cuál era el ñúltimo disco que había escuchado. Y yo respondía: Pues la discografía de Bad Religion que me acabo de descargar de internet. Entonces la presentadora se quedaría un tanto sorprendida y me preguntaría algo como: ¿Y no crees que ya que te gustan deberías de pagarles algo? A lo cual yo enarcaba una ceja, medio sonreía de buena gana, balanceaba la cabeza ligeramente hacia delante y respondía: Sí, me acabo de comprar una sudadera suya.
En ese momento se me cae la conexión y descubre que a 2 metros de mí, justo detrás de RosaPalo, hay una chica, de unos 30-32 años, a la cual, inconscientemente le he arqueado la ceja, le he sonreído y le he hecho un gesto afirmativo con la cabeza. Entonces ella me mira con cara de complicidad, me sonríe y sigue con sus amigos.
Giro la cabeza 90º y me pongo a mirar a la puerta, pero sobre todo, a una casa de cartón que hay en la pared. Apartando la mirada, no te quería mirar pero no te lo tomes a mal. Hasta que la chica en un momento dado no está, y me acerco a RosaPalo a contárselo. Cuanto antes mejor, no sea que luego por fantasear con una reivindicación me "reivindiquen" una caña a la cara.
Vamos, que la chica no apareció más y ni pena me dio ni ná, que tampoco... a mi no me a ti si te no si a mi no me no me pero a ti si te ¡ME COPA!
Quizá suceda de nuevo la próxima vez que ponga el piloto automático en un bar... Deséenme suerte
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